lunes, 24 de septiembre de 2012

Deu n´hi do



Según he podido saber, ha venido al festival de cine de San Sebastián un director americano de entre los más famosos en su género. Bien, pues al tipo no se le ha ocurrido mejor cosa que decir que le gustaría ver a José María Aznar siendo juzgado en el Tribunal de la Haya por crímenes contra la humanidad. Seguramente ha dicho muchas más cosas, pero todos los periódicos resaltan precisamente esa. Supongo que porque los periódicos piensan que Aznar todavía vende. ¿Quién sabe? A lo mejor por una vez aciertan. 

Por otro lado, en el que otrora fuera azote inmisericorde de Esperanza Aguirre, El PAÍS, venía ayer un panegírico de la mandataria regional madrileña, firmado por el Premio Nobel  Mario Vargas Llosa, que, como dicen en Cataluña, y también en Valencia, deu n´hi do, lo cual viene a querer decir algo así como "me cago por la pata abajo". Cosas veredes, que dijo el Cid. 

Por lo demás, y ya que traje a colación a Cataluña, quiero que sepan para que se tranquilicen que lo que en realidad quieren los mal llamados independentistas catalanes es ser como los puertorriqueños. Un estado asociado, dicen. No de los EE. UU. de America sino de la España que les expolia. ¡Deu n´hi do! No hemos salido de una y ya tenemos a ahí a Rita Moreno echándose unos bailongos con Bernardo a los ritmos trepidantes que marca la batuta de Leonard Bernstein.  ¡La Mare de Deu dels desamparats! Quebecq, Lituania, Eslovenia, Kosovo... y ahora Puerto Rico. Estos catalanistas, otra cosa no, pero de cine... saben un rato.

En otro orden de cosas, si los sindicatos horizontales no disponen lo contrario y la catenaria resiste los embates del viento sur, esta tarde, hacia las seis y media, desembarcaré en los andenes de Chamartin.  Lo demás, corre de mi cuenta. 

2 comentarios:

  1. Se te han pasado las islas Feroe, Flandes, Escocia, Eslovaquia y Sudán del sur. En fin, que les den dos duros.

    ResponderEliminar
  2. Dos duros o tres, Jacobo, aunque malauradament creo que saldrán de nuestros bolsillos. Un día no levantaremos para enterarnos de que nuestra cartera de valores se ha venido abajo, precisamente, por haber dado tres duros a esos malandrines.

    ResponderEliminar