Elon Musk

Los que solemos ver Blomberg TV o CNBC sabemos quien es Elon Musk. Pero, claro, esas cadenas de televisión las ve muy poca gente porque, por un lado, hay que disponer de una parabólica y un decodificador, por otro hay que entender algo de inglés, y por otro te tiene que interesar la economía, lo cual que como que no es de gente, por así decirlo, maja. 

Normalmente, durante la semana esas cadenas se dedican todo el día a seguir la evolución de los mercados, dando voz a multitud de expertos en la materia que opinan y predicen con, por lo general, una seguridad en sí mismos que raya en la estética friky. Claro que todas las intervenciones suelen tener, así, como a guisa de descompresión, un colofón tirando a humorístico por aquello de que todos son sabedores  a ciencia cierta de que en economía una cosa es predicar y otra dar trigo. En cualquier caso, a mí, no me importa confesarlo, me tienen enganchado porque tras muchas indagaciones por los diferentes vericuetos de la vida he llegado a la pedestre conclusión de que si Dios existe sólo puede ser en forma de Tratado de Economía. Aparte de eso, añadiría, sólo podemos tener fe en el bicarbonato. 

Pero como las semanas tienen fin y durante ese fin los mercados están cerrados, las citadas cadenas se dedican a emitir reportajes relacionados con los diferentes aspectos de la vida empresarial. Y así es como uno se entera de muchas cosas sorprendentes que hay por el mundo y que no porque las ignoremos dejan de afectarnos mucho más de lo que pudiéramos sospechar. Y es que ni todas esas famosas conquistas sociales son el producto de las luchas sindicales ni todas esas debacles sociales son la consecuencia de las especulaciones financieras. Ni mucho menos. No, hay por ahí unos señores, y supongo que señoras, con unas cabezas excepcionales que inventan artefactos y crean empresas que ponen en jaque todo lo hasta entonces conocido. Edison, Tusla, gente así, por poner ejemplos. 

Esas cabezas son lo que me fascina. ¿Cómo es posible? ¿Por qué tanta diferencia con el común de los mortales? Cojan, agarren, vayan a la wikipedia y pongan Elon Musk. Lean su biografía. Ni que Dios hubiese bajado a la Tierra. Concretamente a California. Desde luego...