martes, 9 de agosto de 2011

Lance de encrucijada.






Con un aire más que frío y un cielo de color inmaculada concepción, dejamos el Juan II de Toro después de suculento desayuno. Por cierto, la camarera que nos ha servido las viandas, una señora por los cincuenta, lucía a esa hora tal profusión de joyas que me ha dado qué pensar. Cosas de la cultura local, he pensado.








Hemos descendido por una carretera empedrada que no se acababa nunca. Pero al final todo acaba por llegar, en este caso la vega. Hemos cruzado el río y  seguido por la carretera que lo bordea por su lado sur. La mañana no podía ser más perfecta para pedalear sin sobresaltos. Carretera sin apenas tráfico, sin apenas subidas. A los lados, ni un centímetro desaprovechado. Maíz, girasol, remolacha, viña, alfalfa. El Jardín del Edén. En Peleagonzalo hemos parado a embadurnarnos de aceites porque el sol ya empezaba con lo que le es propio. Un poco más adelante, sobre la ladera de unos alcores, vemos algo de qué hablar: un experimento de esos que se hacían cuando se pensaba que the party will be running forever. Un hotel-bodega por todo lo alto. Welness a tope. Yacusis y todo eso, pero con vino. Y, así y todo, ni un alma por allí. Bueno, como era por la mañana a lo mejor estaban durmiendo la mona.







Al pasar por Villalazán he visto un graffiti que me ha parecido afortunado. Hacía referencia al irredentismo leonés. Algunos irredentismos, he pensado, se agotan en la expresión artística que inspiran. Menos mal.




Dos o tres kilómetros más y hemos tenido un lance que no ha sido de ínsula sino de los de encrucijada. No sabíamos por donde tirar. Si cruzar el río y seguir por la orilla norte o continuar por la sur. Teníamos una cuesta por delante. Así que para salir de dudas hemos dado el alto a un ciclista que pasaba por allí a toda pastilla. No le faltaba un perejil al tipo. Nos ha casí conminado a seguir por el lado sur. Y cambiar el desarrollo, ha añadido cuando ya se alejaba, con el que lleváis os vais a machacar las piernas y no vais a avanzar nada. Y ya, desde lejos: y engrasar la cadena, aunque sea con grasa de coche. ¡Jo!, nos ha dejado maravillados. ¿Cómo se ha podido fijar en tantas cosas a la velocidad que iba? Sin duda era un lince.

Otro rato de pedaleo y nos hemos topado con una fabrica de suministros eléctricos con muy buena pinta. De paneles solares y así. Mira, me he dicho, esto es futuro. Y he tirado para delante. Y he dado con un campo de fútbol de dimensiones considerables pero que sobre todo me ha llamado la atención por tener una puerta almenada. ¿Y ésto? No he tardado en encontrar respuesta. Justo al llegar a la bifurcación para Villaralbo, allí, a la izquierda de la carretera que lleva al pueblo hay lo que pudiera ser la mayor fantasía de las mil y una noche de los tiempos modernos. www.villaferga.es. Esa es la dirección en la que encontrarán razón de semejante delirio.
He querido acercarme para husmear, pero los perros asesinos que había entre el doble vallado me han hecho desistir. Un ciclista triste porque acababa de enviudar que andaba por allí nos ha explicado algo. Es del dueño de la fábrica de suministros eléctricos que antes les decía. El mismo que ha construido el campo de futbol con la puerta almenada. Sin duda es un enamorado de la cosa medieval.  Por lo visto el castillo es para uso exclusivo de los clientes VIP de CUADROS GENERALES ELECTRICOS. Al principio he tendido al desprecio, pero luego de escuchar un comentario del viudo triste he cambiado de opinión. Es cosa elegante, ha dicho. Sí, todo aquello, una vez que los herederos del fundador se hallen medio arruinados lo convierten en parque temático y les da para vivir. Porque  ese es el tipo de cosas que le gusta al pueblo llano.





Luego, más adelante,  el cartel rutilante de frutas VIRGINIA. Y a continuación GEROVITALIA, un edificio dedicado a las cosas de los viejos que quita el hipo.





Y hemos entrado en Zamora por el puente de piedra. Debe de ser el único en su género que todavía conserva el tráfico rodado. Una verdadera estupidez. Y por allí hemos andado mirando esto y aquello. Todo ese modernismo que debió florecer al calor de los dineros que procuró a España la primera guerra mundial. Por cierto, gran desilusión, el restaurante España lleva años clausurado. Aquella gloria del art decó en estado puro. Así que hemos comido en una terraza que había al lado del local de la Cofradía del Cristo de las Injurias. Y de allí al parque del castillo a sestear. Un rollo, demasiados turistas. Hemos buscado hotel y hemos recalado en uno que se llama Dña. Urraca. A mí me hubiese gustado más uno llamado Vellido Dolfos o, en su defecto, herederos de Dolfos Vellido, pero hay lo que hay y hay que adaptarse.

Y esperar que baje el sol para salir a fisgar.

10 comentarios:

  1. Pues sí,Bellido Dolfos...qué viaje le metió a Don Sancho..que estaba el noble..según la tradicción popular madiciente.."haciendo de cuerpo" en el momento de la agresión..Creo que fué por un tema de reconocimiento nobliliarios..Ahora hasta Del Bosque es marqués..
    Tomaros unos tintos en la Calle de los Herreros..si aún existe..un saludo

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  2. Fue el padre que dividió la herencia entre los tres hijos. Don Sancho ya había reducido a su hermano y se fue para Zamora a ver qué se podía hacer con Dña. Urraca y le salió caro. Antes había hasta una puerta de la traición, pero ayer no la encontré. Por cierto que cenamos en una cafetería de nombre Dolfos. Me hizo ilusión. Las croquetas excelentes y del queso de Zamora para qué hablar.

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  3. ¡Rey don Sancho, rey don Sancho!, no digas que no te aviso,
    que de dentro de Zamora un alevoso ha salido;
    llámase Vellido Dolfos, hijo de Dolfos Vellido,
    cuatro traiciones ha hecho, y con esta serán cinco.
    Si gran traidor fue el padre, mayor traidor es el hijo.
    Gritos dan en el real: -¡A don Sancho han mal herido!
    Muerto le ha Vellido Dolfos, ¡gran traición ha cometido!
    Desque le tuviera muerto, metiose por un postigo,
    por las calles de Zamora va dando voces y gritos:
    -Tiempo era, doña Urraca, de cumplir lo prometido.

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  4. No es raro que no hayas encontrado el Portillo de la traición. El ayuntamiento, siguiendo su tendencia particular a la recuperación de la memoria histórica lo denominó hace poco como Portillo de la lealtad. Así me gusta: o somos o no somos. Ahora solo queda reivindicar a Viriato.

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  5. La leche. Y yo que no había caído. Claro, era lealtad. Domage. Con lo bien que me caen a mí los traidores. Por eso debe ser que me caen tan mal los perros. Si lo llego a saber no ceno en El Dolfos.

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  6. Yo ,con los vascos,las he tenido de todas.Desde una gran amiga vasca en Alemania,Almudena Asiain,de apellidos vascos antiguos,pero que se reía de toda la parafernalia aberztale ,hasta todo lo contrario..Estando en una fiesta de cumpleanos ,allá por los 90,en casa de unos amigos espanoles en Colonia,tuve la desgracia de toparme con una tipa culona que, a parte de feísima(lo siento,pero tengo que decirlo)estaba como una regadera.Como sabía que yo era Castellano,se pasó toda la fiesta intentando provocarme.Me empezó diciendo que el contestador automático lo tenía en Vasco y en Alemán.A su hijo,pobre criatura, lo criaba bilingüe..en Alemán y Vasco...Yo estaba horrorizado ante tanta majadería,pero como viejo zorro,callaba ante la necedad de la pobre mujer.Después siguió con la cantinela de los maketos.Tenía la brillantísima idea de no permitirles votar en unas hipotéticas elecciones por la independencia.Cómo éran los anos de la guerra de los Balcanes,yo le sugerí que ella y sus amigos vascos copiaran el ejemplo Serbio,:encerrar a los bosnio-maketos en los Caseríos y prenderle fuego.Así ,emulando también a Adolfito,se quedarían "Las Vascongadas"-como yo todo el tiempo me refería al País Vasco,para disguto tremendísimo de la cejijunta moza-líbres de -según también ella-descendientes de bereberes y otros andaluces que estaban echando a perder la muy antigua y pura raza Vasca.Estó la sacó de quicio,me decía que yo era como todos los espanoles,y bla bla bla.
    Esto que sirva como ejemplo poco orientativo.Viendo alguno de los capítulos de "Vaya Semanita" descubrí que hay muchos vascos normales" e inteligentes,y mucha buena gente.También descubrí que las vascas son las más estrechas en Espana,cosa que me dejó perplejo.Yo siempre pensé que eran muy liberales.Vaya Semanita tiene un capítulo buenísimo ,se puede ver en you tube,dónde se mofan ,y con cuánta razón ,de los cortes de pelo de las Abertzales,que son de película de Paul naschy.

    Pero eso sí, me gusta San Sebastíán y me muero por un buén Txacolí..con unas alejas de carril..

    A seguir viajando

    Un saludo

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  7. Mi comentario se refiere a tus palabras sobre la vasca en "Orientación femenina"
    Lo digo para que no penseis que ya estoy empinando el codo a estas horas..

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  8. Por cierto,la única vasca salida que conozco es Idoya López Riano,más conocida como la tigresa,terrorista vasca que entre cadaver y cadaver se tiraba ,según cuentan, a bazokis enteros...Pero ahora ya he caído...el padre de la Tigresa es Salmantino....

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  9. Ignacio, yo también conocí la calle Herreros en sus tiempos de esplendor. Ahora parece un cementerio. Cuatro colgaos y un par de viejos a lo García Calvo.

    Al tema de los vascos creo que le podríamos dedicar un monográfico. Para mí, en su conjunto, es la gente más atrasada de España con diferencia.

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  10. Tienes razón...toda la razón.Y sobre todo,por qué son tan feos ..nunca lo he entendido muy bién

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